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martes, 11 de junio de 2013

Decálogo del triatleta lesionado

Si algo estoy aprendiendo en estos meses de lesión, que apuntan a que me van a apartar de los pedales y las zapatillas el resto de la temporada, es que desde el otro lado de la barrera todo se ve muy diferente. Según como te lo tomes, las cosas te pueden afectar más o menos. Ya que todo lo que os pongo aquí son OPINIONES, nunca consejos, que cada uno haga lo que vea conveniente, sólo expongo mi punto de vista. 

                               

Para mí, que soy un apasionado del tri y que 25h al día estoy pensando en ésto, es duro que una lesión por las buenas me prive de hacer lo que más me gusta. Podría haber tomado la postura de mantenerme alejado del ambiente triatético, pero me resulta imposible y así sería más difícil mantener los entrenamientos de natación, que es lo único que puedo hacer. He preferido,o simplemente ha sido así, seguir inmerso como antes en este mundillo o más, con las ganas intactas y aún más reforzado psicológicamente para cuando toque volver a entrenar.


Allá van mis 10 puntos sobre cómo enfoco esta etapa:

1. No me doy por vencido. Casi todo tiene solución, así que hay que andar tras ella hasta que de con la solución. Tras muchos meses lesionados, aún estoy por encontrarla, pero no cesaré hasta tener el diagnóstico y el tratamiento correcto.


2. No paro de entrenar lo que puedo. La rodilla por desgracia no me deja ni correr, ni pedalear, que ésto último me vendría bien para equilibrar el rendimiento ciclista que es mi gran tendón de Aquiles, a parte de ser la disciplina más entretenida. Por lo que sólo queda nadar, nadar y nadar. Pese a no haberlo hecho todo lo que debiera, estoy teniendo una buena mejora y cuando vuelva a competrir sé que nadaré bien. Hace unos meses hacer 14'47" sin volteos en un test de 1000m en la piscina era impensable tras poco más de un año nadando.

3. Mantengo la motivación. Sea de la forma que sea, intento mantenerme siempre a tope psicológicamente. Como ya sabéis, me encanta el entorno PRO, seguir las carreras, resultados, material, todo. Me ayuda a seguir con ganas día tras día. Estudiar nuevas estrategias en carrera o qué pruebas me gustaría hacer en un futuro me ayuda a mantener las ganas intactas.

4. Aprovechar para hacer otras cosas. Si antes por los largos y tempranos entrenamientos del fin de semana no podías hacer ciertas cosas, aprovecho para quitarme esa espinita y dormir más o salir de fiesta de vez en cuando.

5. Respaldar y apoyar a mis amigos y compañeros. Por desgracia, @Alvaroyayi también está en el dique seco, pero no fallamos a ninguna competición para animar a @Carballo17 y al resto del Equipo @irontriath, que nos mantiene con ese gusanillo de competición.

6. Los compañeros y los amigos estarán ahí. Igual que animo a mis compañeros y amigos, también ellos me animan a mí con la lesión, a todos nos gusta que nos tranquilicen, que nos den otro punto de vista o que nos escuchen en los momentos más difíciles.

7. Seguir mejorando. En relación también al punto 2, la lesión nos puede hacer a equilibrar nuestro segmento más débil, o a afianzar simplemente en lo que nos permita entrenar. Si puedo competir en alguna de las disciplinas, lo hago para matar o al menos dormir al mono del dorsal y ver las mejorías.

8. No será fácil y siempre habrá momentos malos. Muy malos. No faltan los momentos de bajón, en los que estás deseando salir a entrenar, a machacarte día tras otro, picarte con la grupetta y estar en la línea de salida. Hay que saber superarlos e intentar buscar el lado positivo. Esta asignatura la tengo pendiente.

9. Intentar evitar los "y si...". Esta asignatura sí que la tengo suspensa. Pensar cada dos por tres dónde estarías en cada competición, qué tiempo harías aquí o en qué grupo saldrías allí no trae nada bueno, es dinamita. 

10. Respetar al cuerpo. Hace unos meses @VictorPirata85 me dijo algo como: "Hay muchos años y muchas pruebas, pero cuerpo sólo tenemos uno y hay que cuidarlo." Qué razón tiene. Intentar acelerar una recuperación, obviarla o mentirnos sobre nuestro estado puede ser fatal y traerte consecuencias muy negativas. En este caso sí cumplo, si duele, no me vale la pena forzar. Soy de los que piensan que una carrera es para dar todo lo que tengas y llegar con garantías a la línea de salida, no para hipotecar nuestra salud y los meses venideros.


Espero que os haya servido de algo o al menos para ver cómo intento sobrevivir estos meses. Así que este verano travesías, que es lo que nos queda.


Un abrazo y gracias por vuestro apoyo.

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