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sábado, 20 de septiembre de 2014

El re-debut.

No veía el momento de volver a escribir una crónica. Justo ahora hace dos años del último dorsal en triatlón, y 18 meses del inicio de la lesión, que no es poco. Tras un año de mala y poca natación con problemas de cuello, un verano de acondicionamiento paulatino, metiendo algo de bici y natación sin mucha historia y empezando a correr en septiembre, quizás era un poco precipitado competir ahora, pero mi cabeza lo necesitaba.

Estos momentos no tienen precio

Hubiese sido perfecto si llegamos a participar Álvaro, Fran y yo, pero finalmente Álvaro tuvo que estar detrás de la valla, aunque sí estuvo su padre, otro compañero de entrenamientos. Debido a una mala gestión de los entrenamientos en la semana previa, llegaba con las piernas bastante tiesas al día de la prueba, con el último mes sin ninguna sesión de natación salvo el jueves antes de la prueba, suficiente para confirmar que el codo estaba en condiciones. Pese a ser en Málaga, tocaba madrugar mucho para recoger dorsal e ir sin prisas. Preparando el material en boxes veía que me había metido en un berenjenal, con 3 semanas de carrera continua, sin ningún toque de ritmo en los entrenamientos y con poca confianza. "Sólo es distancia sprint" (750m-20km-5km) me repetía para mí mismo para intentar relajarme, y yo que no soy muy pausado, los nervios se apoderaban de mí. Típicas risas del grupo, un breve calentamiento con el agua fresquita y a la línea de salida. 



El nivel era muy bajo, con ninguno de los muchos habituales de las pruebas provinciales entre los 250 participantes. Me pongo en primera línea, la salida es en diagonal y el recorrido en forma de U. Bocinazo de salida, haciendo gala de mi falta de explosividad en la arena y en los primeros metros del agua en un bonito jacuzzi tras los pies de algunos triatletas. No veo, ni puedo ver, así que me limito a gestionar los golpes y que pasen los metros. La primera boya la paso sin golpes en el giro y encaro bien la segunda que estaba algo más lejos, mantengo buenas referencias y pongo el único ritmo que puedo llevar hasta tocar tierra el duodécimo, que da una idea del nivel hoy. Álvaro me canta que voy delante de Fran, un pequeño golpe de moral, y justo en el pasillo está mi tío como mi fotógrafo oficial para inmortalizar el momento.


No hay grupo delante, no hago la mejor de las transiciones pero voy con el corazón en la boca, bici en la mano y salto de la rana para salir de la T1 junto a otro atleta. No me bajan las pulsaciones, no encuentro golpe de pedal más bien creo que el golpe me lo han dado a mí. Por detrás vienen algunos grupitos reducidos que al pasarme me sacan de rueda, ¡no voy! El cuentakilómetros no va, que creo que viendo la que llevaba encima acabó siendo una ventaja no ver la velocidad. Finalmente me engancha un grupo de unos 10 miembros en el que viajaba Fran, ésta es la mía. Voy en la nevera todo el rato intentando guardar lo máximo, y para que nos vamos a engañar, porque no tenía para más. Veo que Fran pasa a relevos y el c***ón nos pone en fila de uno. Antes del último giro pierdo contacto con el grupo, me limito a regular y a no bajarme muy tostado a correr, sumado a un baile de zapatillas al descalzarme en la bici, pierdo unos largos 25" con el grupo en boxes.


Cuando cuelgo la bici está Fran saliendo a correr, cambio sin muchas historias y a echar lo poco que me queda ante los ánimos de los míos. Pese a ir justo recojo algunos cadáveres del grupo y en el primer giro ya veo que va a ser imposible coger al barbas, así que nos animamos mutuamente. Al paso por el punto de avituallamiento los ánimos me dan un extra, y al igual que en la natación voy a ritmo crucero hasta el final. Al ir tan justo conseguí cambiar el chip y limitarme a disfrutar del momento, de estos meses de dudas, de muy malos momentos, de lo que esperaba ésto, de todos los que me han apoyado que no son pocos y de volver a cruzar un arco de meta. Me daba igual llegar el 30 que el 70, no iba a ganar nada más que un dolor de piernas extra para la semana que viene en la que hay que seguir sumando entrenamientos. Ya pisando la alfombra me acerco a saludar a Manu y a Carlota, entro relajado y dejo que un gracioso esprinte al final para joderme la foto. 




Abrazos en meta, contengo las lágrimas como un campeón y a comentar la carrera, reírnos otro rato y saludar a amigos y conocidos. El puesto es algo meramente anecdótico, 34º general y 3º sub23, pero como os he dicho hay que ser honestos con el nivel de la prueba. Tengo que dar las gracias a los que me habéis animado en carrera, los que se han alegrado de volver a verme en carrera, los amigos y familiares que se han acercado sólo para apoyarme y a los que no han podido. También a Daniel Hurtado de Clínica de Fisioterapia Daniel Hurtado con el que seguimos trabajando ahora para reforzar el cuello y evitar lesione, a Víctor Hidalgo de Clínica del pie La Malagueta, a Irontriath y a todos los que me han preguntado o se han alegrado de mi vuelta.


Pero ya pasó, ahora a pensar en seguir entrenando. Siento que es un nuevo debut, un buen momento para hacer un punto y seguido y disfrutar al máximo de este bonito deporte.

Muchas gracias a todos y perdonad el ladrillo.



2 comentarios:

  1. Siento una auténtica alegría al poder leerte de nuevo en tus crónicas. Al final, todos los esfuerzos, la constancia y los sacrificios de estos meses tienen sus frutos. ¡Enhorabuena! Espero verte en directo en la próxima prueba. Yolan.

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  2. Lo importante es que estás de vuelta.....todo llega campeón!!!! Besos. Rosa

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